Hay una chica a la cual nadie escucha si no habla fuerte.
Es orgullosa, a pesar de que en el fondo siente que no vale así tanto como los demás.
Es el tipo de chica que a veces olvidan, la chica de la sonrisa de día y recuerdos por la noche. La que todos creen seria, pero no lo es realmente. Es de esas que nadie nota a simple vista y que aunque la hayan visto más de tres veces se siguen olvidando su nombre, la que si hay solo espacio para dos personas, va atrás sola. La que siempre se enamora de alguien que tiene miedo de perder, la que todos describen como “buena amiga” porque no saben que más decir. Ella vive por los que ama. Ella se siente perdida y no sabe que hacer.
Él.
Es un maníaco de los detalles y un psicópata enamorado de las cartas escritas a mano. Solía ser un hombre muy distinto a lo que es ahora, tiene una cultura rallante en la locura . Este individuo de ojos oscuros admite haberse enamorado de unadama que toca el piano cada noche y que, al igual que las mujeres que el solía enamorar, tiene mil virtudes y secretos bajo su vestido de gala. Él tiene millones de pecados, todos ellos, conocidos por nadie . Pero el sentimiento hacia ella tiñe la ciudad de una magia que ni siquiera la más roja de las pecadoras va a poder reemplazar jamás . Se apoyó suavemente sobre el cuerpo de su querida y, escondiendo el rostro en su pelo, recorrió su cuello y sus hombros ; ella se atrevió a sonreírle. Era tan tímida, tan dulce . Él sintió que su corazón ardía con fervor . Movido por un arrebato, la besó . -Tengo que ir - le susurró al oído. Él refunfuñó. Finalmente, consintió en dejarla ir. Se cubrió con las sábanas: sin ella, el frío era des...
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