Cosas Perdidas

Siempre he optado por la posibilidad de fantasmas, que aceptar la existencia de duendecillos, de quienes se dice que esconden, extravían o incluso roban objetos.
Pero, de que hay cosas en esta casa que se pierden, aparecen en los lugares más inverosímiles o definitivamente no vuelven, no hay duda.
¿Serán nuestras distracciones?
¿Padeceremos de sonambulismo?
¿Son los visitantes del panteón que está a escasos diez metros metros de nuestro domicilio?
¿O es culpa del duende verde?

Comentarios

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. podria darte respuestas a esto pero llegue a la conclusion de que solo se que nada se

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Él.