Aún espero el día en poder mirarme al espejo y no reconocerme.
Poder dejar esta apariencia atrás y comenzar a lucir como mi alma se ve.

Bonita.

Comprendo el por qué en la media pasé tan invisible y también comprendo el por qué detesto recordar como me veo, incluso hoy.

Ojalá algún día podamos mirar con los ojos cerrados, quizás de esa forma todos podríamos mirarnos mejor.

Si, tengo un feo envase pero tengo un buen corazón.
Y si necesita conversar, aquí estoy.
Para eso no se necesita ojos sino tan solo compañía a ciegas.

Yo solo quiero ayudar a la gente a que sea más feliz, lo juro.

Y no me voy a rendir hasta poder ayudar.

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Él.