Porque me niego a que orgasmo sea una palabra condenada a siete segundos de placer. Amar las letras consigue que no estés de acuerdo con su significado o que no sea lo suficientemente amplio. Por ejemplo “madre” nunca le llegará ni a la sombra de lo que para mí significa la mía. O “muerte” jamás podrá dañar la eternidad de mi padre. “Orgasmo” el punto máximo de placer no puede ser llamado a algo que consigues con cualquiera. O incluso solo. Yo al punto máximo de placer he llegado con su sonrisa, incluso más que haciendo el amor con alguno del que omito el nombre por respeto. A él le ha bastado abrir la boca y mi placer, mi orgasmo, ha durado mucho más de siete segundos. De hecho juraría que aún sigo en él.
si llenas todos tus vasos con la misma cantidad de agua, alguno de ellos terminará rebalsando.
Comentarios
Publicar un comentario