Les presto a mi papi para que se rían un ratito. Para que les llene de seguridad, y para que tengan un superhéroe de bolsillo. Gracias por revisar el clóset cuando me daba miedo mi pieza. Gracias papi por cuidarme siempre, por llevarme al trabajo incluso ya siendo un adulto. Por llevarme al aeropuerto en todos mis viajes, por ayudarnos a avanzar en el baño de la casa. Por venirme a buscar cuando estoy enferma. Gracias por amarme y aceptarme desde siempre (excepto cuando ya me pongo muy mal genio porque quien po xD). Aún a mis 29 espero que cada colectivo sea usted manejando. Te amo, les amo. Y pronto veremos una película, pero no comamos mucho, porque estamos gorditos.
Mi muchacho
"El amor estaba ahí, cerquita, esperando que le hablara. Escondido en timidez, disfrazado de amistad.". Y es que no sabe lo emocionada que me pongo cada mes esperando los 13. Y si, a veces dejo esperar un poco para no parecer tan ansiosa, pero miro el reloj cada 12, esperando que ya comience a ser 13. Hay cosas que me gustan de usted con ganas. No hablo de las facciones de su rostro o la proporción de sus piernas. Tampoco hablo de la forma de sus ojos ni mucho menos de la forma en que sus manos se moldean a mi cuerpo cuando hacemos el amor, no hablo tampoco de su cuerpo cuando lo veo vestirse ni de como sus dedos se enredan en mi cabello cuando me toca. Hablo de cosas sencillas como, por ejemplo: me gusta la manera en que sonríe cuando se enoja y también cuando no lo está. Me gusta su mirada concentrada cuando estudia, sus lunares rodeando sus hoyuelos. Me gusta cuando me dice que estoy regalona y le doy toda la razón del mundo. Me gusta porque me ha convertido en alguien...
Comentarios
Publicar un comentario