Vi una flor, estaba decaída, apagada, a punto de marchitar.
La cuide algunas semanas.
La regué, la cuide y le dije cada día lo bonita que se veía.

Hoy la volví a ver.

Está repuesta, con una buena postura, lista para pasar el invierno, ya no se veía triste, pude ver como mi amor tuvo su efecto en ella.

Me sentí orgullosa de ella al verla.

Creo que lo mismo pasa con algunas personas.
La gente se olvida de regar.

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Él.